“El asedio era horrible como que tal éramos unas criminales”, describió María Gómez al salir de un establecimiento de comidas, ubicado en un centro comercial de Managua, donde permaneció bajo asedio policial por más de tres horas junto a un grupo de familiares de presos políticos.

Karen Lacayo, Ruth Martínez, Maykel Miranda, Dami Martínez, Esperanza Sánchez y el excarcelado Gerson Snayder Suazo permanecieron junto a Gómez desde horas del mediodía bajo el acoso de los agentes que tenían rodeado el lugar.

“Salimos como a las tres de la tarde, adentro habían unos siete policías de tránsito, los dirigía una mujer policía, y afuera habían más de 15 policías”, dijo Gómez.

Una vez que lograron salir del lugar abordo de un vehículo fueron perseguidos por los agentes por algunas calles de Managua.

“La policía nos iba siguiendo, de hecho también mandaron a llamar a personas afines al Gobierno para ofendernos, pero nosotros hicimos caso omiso entramos al vehículo y logramos salir hasta cierto punto, y de ahí buscamos la manera de llegar a nuestras casas”, describió Gómez.

“No somos delincuentes”

Los familiares de presos políticos se quejaron de que los agentes al servicio del régimen de Daniel Ortega mantienen el asedio, inclusive en lugares de este tipo donde se reúnen las familias nicaragüenses.

El momento en que la policía entra al establecimiento ubicado en Metrocentro quedó grabado en videos y fotografías. Personas presenten en el supermercado le gritaron a los policías que se retiraran y que dejaran en paz a los familiares de los presos políticos.

“Ya ni lugares públicos podemos visitar, no somos delincuentes, vergüenza debiera de darles porque yo les pago de mis impuestos”, gritaban a los agentes los familiares de presos políticos.

El fin de semana, la Policía orteguista también entró a un hotel donde familiares de presos políticos realizaron un plantón exprés para exigir la liberación de los reos de conciencia.

En Nicaragua, existen 65 presos políticos que permanecen en la cárcel desde el estallido de la crisis política en abril de 2018.

Familiares de los encarcelados y otros grupos de opositores reclaman a la fecha la liberación de todos, sin excepción alguna, y afirman que continuarán movilizándose para exigir que se haga justicia.

“Gracias a Dios estamos bien, pero siempre con el temor porque hoy en día el Gobierno ni eso nos permite visitar un centro comercial, a todas los familiares de los reos políticos o a cualquier persona que no esté de acuerdo con su ideología”, puntualizó Gómez.

El pasado 30 de diciembre, el régimen ordenó la liberación de 91 presos y presas políticas, entre ellos los 16 jóvenes conocidos como la banda de “Los aguadores” que fueron encarcelados durante 45 días por solidarizarse con un grupo de personas que habían iniciado una huelga de hambre en la Iglesia San Miguel de Masaya.

La Lupa Nicaragua
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