Hoy se cumplen seis días desde que la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo recrudeció la represión contra opositores, haciendo uso de sus fuerzas represoras paramilitares, como parte de una estrategia para impedir la conmemoración del segundo aniversario de la “Rebelión de Abril”.

No obstante, los nicaragüenses que hace dos años se levantaron contra el régimen, siguen exigiendo justicia, libertad y democracia. La tensión que se vivió al amanecer de este lunes en la comarca de Esquipulas en la Isla de Ometepe revivió las protestas de un pueblo que también demanda la salida de Ortega y Murillo.

En Matagalpa, frente al atrio de la catedral en este departamento, un grupo de jóvenes autoconvocados realizaron un piquete exprés la tarde del lunes en apoyo de las familias que sufrieron la represión policial en Ometepe.

“Nicaragua es Ometepe y el pueblo se respeta, justicia para nuestros asesinados. Matagalpa no se vende, ni se rinde”, gritaban los jóvenes opositores que sostenían pancartas demandando justicia por los asesinados y libertad para los presos políticos.

Igual que estos jóvenes, desde hace seis días los nicaragüenses empezaron a realizar algunas actividades para conmemorar el segundo aniversario de la “Rebelión de Abril” lo que provocó la tensión de los últimos días. Muchas fueron virtuales, pero el régimen sacó a decenas de policías a las calles por temor a cualquier manifestación.

Entre el 15 y el 20 de abril, además del ataque perpetrado por la sancionada Policía Nacional en Ometepe, se registraron en total 39 detenciones ilegales en diversos puntos del país, entre ellos el secuestro del periodista Denis Alaniz, originario de Santa María de Pantasma, jurisdicción de Jinotega, quien labora para el canal local Notimatv de Matagalpa.

El 18 de abril, el Movimiento de Campesinos, reportó el asesinato del opositor Félix Lacayo, ocurrido en el Palenque Los Chiles, jurisdicción de San Carlos, Río San Juan, por “posibles connotaciones políticas”.

ASEDIO Y HOSTIGAMIENTO

En este contexto, líderes opositores de Masaya, León, Granada, Managua, Jinotega, San Rafael del Sur, Estelí, Matagalpa, Boaco, Chontales, Río San Juan, Nueva  Guinea y Rivas, sufrieron asedio en sus viviendas o negocios por parte de turbas paramilitares. En total, se registraron 132 asedios de este tipo, según la Unidad Nacional Azul y Blanco.

En este contexto, la Policía orteguista realizó 10 allanamientos extrajudiciales en viviendas de opositores del régimen. Al menos tres familias, de personas que fueron asesinados durante las protestas, fueron asediados y hostigados cuando se dispusieron a realizar actos conmemorativos.

ORGANISMOS DENUNCIAN

Ante la situación vivida en el país, un total de 14 reconocidas organizaciones defensoras de derechos humanos, nacionales e internacionales, suscribieron un comunicado en el que denunciaron que, en el aniversario de las protestas en el país, hubo un incremento en las acciones estatales de hostigamiento y amedrentamiento.

La Organización Mundial Contra la Tortura(OMCT), Amnistía Internacional, Centro por la Justicia y el Derecho Internacional , Fundación Acceso, Wola Iniciativa Mesoamericana e Defensoras, así como el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (CENIDH) y el Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, figuran entre las organizaciones firmantes.

“Esta escalada de agresiones es parte de la estrategia reiterativa del Gobierno para desarticular la protesta ante acontecimientos relevantes para la crítica social en Nicaragua”, afirmaron las organizaciones defensoras de derechos humanos.

Desde el estallido social en abril de 2018, a la fecha, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) identifica, por lo menos, 328 personas asesinadas como consecuencia de la represión estatal, más de 2 mil heridas y al menos 100 mil desplazadas forzosamente por la violencia política.

Foto principal: Confidencial

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