Aunque el gran capital estuviese dispuesto a aceptar la permanencia del régimen Ortega-Murillo hasta el 2021, con el fin de evitar cambios inesperados que pudieran afectar sus intereses económicos y privilegios, la realidad del país se cae por su peso y demanda con urgencia, un cambio de rumbo como señalan la mayoría de las y los nicaragüenses.

Este es un espacio del programa Feminista La Corriente.

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