El chequeo ginecológico es una revisión periódica que se deben realizar las mujeres y jóvenes para detectar de manera temprana enfermedades y alteraciones que pueden haber en el aparato reproductor femenino y prevenirlas, indica la especialista en Ginecología y Obstetricia, Scarleth Solís.

Estos chequeos se deben hacer como mínimo una vez al año, insiste la doctora.

Los chequeos consisten en una consulta médica y en la realización de exámenes que evalúan el bienestar de todos los órganos reproductivos.

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Durante la consulta médica la doctora recolecta información de la historia clínica de las pacientes, para detectar factores de riesgos y antecedentes patológicos que se pueden asociar a enfermedades.

Además de la consulta, los exámenes básicos recomendados para realizar son tres, explica la doctora Solís. Estos son el Papanicolau o citología cervical, ultrasonido pélvico y revisión de mamas. “Los exámenes se indican según la edad de la paciente y su estilo de vida”, expresa la doctora. 

El Papanicolau es un examen que toma una muestra del cuello uterino para detectar lesiones que se pueden desarrollar en un cáncer. Se lo deben realizar las mujeres desde que iniciaron su vida sexual, repetirlo cada año y dejarlo de hacer hasta los 75 años.

El ultrasonido pélvico está indicado para las mujeres de cualquier edad, incluso para las jóvenes. Este examen tiene la finalidad evaluar el útero y los ovarios para detectar quistes, miomas y otras alteraciones que requieran vigilancia y tratamiento.

El tercer examen es la revisión de mamas. La doctora Solís indica que las mujeres pueden hacerse solas un autoexamen de mamas una vez al mes, pero también una médica puede hacer la evaluación a las pacientes.

De manera adicional, la doctora recomienda realizarse ultrasonido de mamas, el cual puede hacerse en los hospitales. Este ultrasonido se lo pueden hacer las mujeres de cualquier edad una vez al año. Y las mujeres mayores de 40 años deben realizarse una mamografía también una vez al año. 

“Todas las mujeres deben hacerse chequeos, incluso las que no hayan iniciado su vida sexual. En ese caso, el único examen que no se harían es el Papanicolau. Por ejemplo, una joven de 18 años que no ha iniciado su vida sexual, debe hacerse el ultrasonido pélvico y una revisión de mamas”, explica la doctora Solís.

Mujeres pueden hacerse chequeos de manera gratuita en los hospitales públicos

Tanto el Papanicolau, como el ultrasonido pélvico, ultrasonido de mamas y mamografías, se pueden realizar de manera gratuita en los hospitales públicos de todos los departamentos del país, señala la doctora Scarleth Solís.

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“Una mujer puede llegar al hospital o al centro de salud y solicitarlo. Si está disponible en ese momento se le hace o se pone cita”, indica.

Solís apunta que las mujeres deben ir preparadas para hacerse los exámenes. En el caso del Papanicolau, las mujeres no deben estar menstruando, ni haber tenido relaciones sexuales el día anterior, ni haberse puesto óvulos, cremas o duchas vaginales. 

Por su parte, los ultrasonidos se hacen generalmente con citas. La única indicación para el ultrasonido pélvico es que las pacientes deben llegar con la vejiga llena. Y para el ultrasonido de mamas, las mujeres deben hacérselo una semana después de la menstruación.

Si no se siguen estas orientaciones los exámenes pueden obtener resultados erróneos, advierte la doctora.

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La Lupa Nicaragua