Familiares de quinceañera de San Isidro: «No se suicidó, la Policía no quiere investigar»
Autoridades policiales alegaron que la muerte fue por suicidio. Sin embargo, la familia identificó señales de violencia en el cuerpo de la adolescente.
Autoridades policiales alegaron que la muerte fue por suicidio. Sin embargo, la familia identificó señales de violencia en el cuerpo de la adolescente.
Familiares de la adolescente de iniciales E. R. U., de 15 años, encontrada con un disparo en la cabeza el pasado 15 de abril, exigen la reapertura de las investigaciones para que se esclarezcan las causas de la muerte de la menor, pues aseguran que la Policía del régimen Ortega-Murillo cerró el caso dictaminándolo como “suicidio”, pese a que el cuerpo tenía signos de violencia.
“El fin de semana pasado se fue a la estación policial de San Isidro, en Matagalpa, y dijeron que el caso está cerrado. Nuestra demanda es que se abra nuevamente, que investiguen a fondo, porque ella no se suicidó. Nosotros revisamos el cuerpo, tomamos fotos y notamos que tenía signos de tortura o violencia”, indicó uno de los familiares bajo condición de anonimato.
El cuerpo de la adolescente fue encontrado la noche del sábado, 15 de abril, con un disparo en la cabeza dentro de una bodega de una finca productora de arroz, en San Isidro, Matagalpa.
Los familiares de la adolescente explicaron que la menor fue a esa finca a visitar a un hombre al que identifican como, Yelkin Manuel Larios, de 24 años, quien labora en ese lugar como vigilante y es familiar de un exnovio de la menor.
“Ella salió el sábado, 15 de abril, temprano y usó el celular de uno de sus sobrinos y ahí dejó abierta su cuenta de Facebook y así es que nos dimos cuenta de la conversación que tuvo con Yelkin Manuel Larios, en la que coordinan el encuentro en esa bodega, donde ese hombre trabaja de vigilante”, explicaron.
Reportes de medios oficialistas refieren que el sujeto con el que se encontraba la menor salió de la bodega a orinar, dejando el arma que usaba para su trabajo como vigilante, y al regresar encontró a E. R. U. con el disparo en la cabeza, por lo que dio aviso al propietario de la finca y ambos llamaron a la Policía.
Lea más: «No hay palabras para expresar el dolor que siento como madre»
La familia enteró del deceso de la adolescente porque la madre de uno de los cuñados de la víctima, habitante de San Isidro, Matagalpa, les llamó para informarles del hallazgo del cuerpo con un disparo en la cabeza.
La quinceañera habitaba con su familia en La Bocana, Tipitapa. Cursó hasta sexto grado de primaria y tenía un año sin estudiar.
El hombre con el que se encontró la menor en la finca arrocera de San Isidro fue dejado en libertad, indicaron los familiares, luego que la Policía dictaminó que fue suicidio.
«Liberaron al principal sospechoso de la muerte de ella. Él estaba con ella antes de morir y no creemos que fue suicidio, ella tenía signos de haber sido torturada, golpeada, tenía moretones en el abdomen, heridas en las piernas, un pie como quebrado y de eso no sale nada en el supuesto dictamen forense que nos entregaron, entonces, no fue suicidio, no tenía solo el disparo y por eso exigimos que investiguen a fondo”, remarcó el familiar.
Además, reveló que el pasado lunes, 17 de abril, pidieron a las autoridades del Instituto de Medicina Legal que practicara una autopsia al cuerpo de la menor, previo a que fuera enterrada, pero estos, pese a que en un inicio aceptaron, argumentaron que no podían proceder porque el caso “estaba cerrado en San Isidro”, pese a que no habían transcurrido ni las primeras 48 horas de investigación del caso.
Lea más: Dictadura detuvo a 12 personas durante el aniversario de la Rebelión de Abril
Los familiares de la quinceañera reiteraron que están dispuestos a que el cuerpo sea exhumado para que se le practiquen nuevos estudios forenses y se esclarezcan las causas de la muerte.
“Exigimos que se estudie el cuerpo, porque a ella no la abrieron, no le hicieron nada de autopsia para saber por qué murió, queremos que abran el caso, nosotros creemos que hubo mano criminal y al principal sospechoso, que en un inicio estuvo retenido, el hombre con el que se encontraba, Yelkin, ahora está libre”, lamentaron.
Datos de Católicas por el Derechos a Decidir revelan que el primer trimestre de 2023 fue crítico para la vida y derechos de las mujeres. La organización reportó entre enero y marzo un total de 26 femicidios de ciudadanas nicaragüenses dentro y fuera del territorio nacional, siendo marzo el más sangriento de todos con 12 femicidios.