
Bajo persecución: La realidad de las defensoras en Nicaragua
Tres defensoras cuentan sus historias de lo que significa realizar su labor en el país y los peligros que enfrentan por defender los derechos humanos.
Tres defensoras cuentan sus historias de lo que significa realizar su labor en el país y los peligros que enfrentan por defender los derechos humanos.
La falta de políticas públicas que combatan la discriminación, orilla a las personas LGBTIQ+ a la deserción escolar y a empleos precarios.
Acceder a una vivienda es un derecho que se ve limitado para la diversidad sexual porque en su mayoría se desempeña en labores precarias, ingresos bajos e informales.
La discriminación y la estigmatización afectan a la diversidad sexual en los espacios de atención médica, lo cual los limita a su acceso.
Conciliar entre la maternidad, el trabajo, el espacio personal, la formación profesional se hace imposible para las madres cuando no hay corresponsabilidad de los padres, y hay carencia de una estructura de apoyo para la crianza y los cuidados.
Muy poco se habla de la violencia obstétrica, pero en los últimos años se han identificado prácticas médicas que atentan contra las decisiones de las mujeres, su vida y la de su descendencia.
A pesar que las mujeres adultas tienen el derecho de esterilizarse en los hospitales públicos, el personal de Salud Pública continúa decidiendo en sus cuerpos.
Esmeralda cuenta cómo fue el proceso de adopción en Nicaragua y cómo ha tenido que lidiar con las dificultades que implica ser madre adoptiva.
Las abuelas en Nicaragua juegan un papel fundamental en las labores de cuidado, lo cual hace que estas mujeres repitan procesos de crianzas de dos y hasta tres generaciones
Las madres adolescentes son obligadas a abandonar el sistema educativo lo que las condena a la pobreza.