David Quintana, director de la plataforma digital Boletín Ecológico, se convirtió en el segundo periodista independiente de Nicaragua en ser declarado culpable por el delito de calumnias por un juez de la dictadura.
“Me han hallado culpable solo por informar (…) Me condenan por un delito en el cual está claramente establecido que tenía yo derecho de informar”, señaló Quintana.
El juez José Ernesto Martínez Velázquez, titular del Juzgado Quinto Local Penal de Managua, fue quien sentenció al periodista tras dar lugar a la querella promovida por Nelson Enrique Vásquez Oporta, excamarógrafo del oficialista Canal 8 y su esposa, Junieth Dávila Cruz.
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La acusación aludía a una transmisión de Facebook del 17 de junio de 2020 que Quintana realizó en la página de Boletín Ecológico, en la cual entrevistó a dos personas que, un día antes, fueron desalojadas violentamente por la Policía, a raíz de un altercado que sostuvieron con Vásquez Oporta y Dávila Cruz.
“Él sabe que estuve ahí por decir la verdad, había otros colegas periodistas en el mismo lugar, a la misma hora, informando lo mismo que yo informé y solamente se fueron contra mí, porque le molesta a la dictadura, a Daniel Ortega y Rosario Murillo el trabajo que hace Boletín Ecológico”, mencionó el periodista.
Quintana recordó que, por informar, se convirtió en “una molestia para este régimen”.
“Como recordarán, me han robado mis equipos, me han golpeado, me han amenazado y me han cortado la libertad de expresión”, señaló el director de Boletín Ecológico.
Condena “injusta”
La abogada, María Oviedo, defensora de la Comisión Permanente de Derechos Humanos, recordó que la acción penal en contra de Quintana, debió ser rechazada desde el inicio porque se presentó de forma tardía.
El pasado 4 de febrero, la abogada Oviedo, impulsó una apelación que buscaba frenar la acusación, debido a que se presentó de forma tardía, pero fue rechazada y se continuó con un proceso en el que la parte acusadora intentó “incorporar pruebas de manera ilegal”.
“Mi representado ha sido condenado injustamente (…) Una vez notificada la sentencia vamos a apelar, hoy se solicitó a la judicial que se le revocaran las medidas cautelares, porque ya no tenían sentido”, dijo Oviedo.
A Quintana se le impuso al inicio del proceso retención migratoria, por lo que no podía salir del país mientras duraba el juicio, misma que fue revocada.
La parte acusadora solicitó la pena máxima de 300 días multas por el delito de Calumnias.
PCIN: “Agresión” al periodismo
Quintana se convirtió en el segundo periodista en ser declarado culpable por un delito de esta naturaleza.
El 23 de septiembre de 2020, la periodista y jefa de prensa de Radio La Costeñísima, Kalúa Salazar, también fue declarada culpable por el delito de calumnias en la que tres colaboradoras de la Alcaldía sandinista de El Rama, promovieron la acción penal.
Abigail Hernández, miembro del Comité Ejecutivo de Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN), señaló que este caso es una prueba más de las agresiones del régimen en contra de periodistas independientes.
“Como PCIN seguiremos dándole acompañamiento a (Quintana) hasta donde esto llegue, no es una agresión únicamente para David Quintana, consideramos que es una agresión para nuestra organización como tal y para cada hombre y mujer de prensa independiente en el país”, mencionó Hernández.
Según Hernández, tanto el caso de Quintana como el de Salazar son ejemplo de la «persecución» del régimen contra las mujeres y hombres de prensa.
«Hay otro tipo de delitos que se están cometiendo contra los y las periodistas, amenazas, golpes, robo de equipos, persecución, amenazas a sus familiares, espionaje, son situaciones que desde PCIN hemos mantenido que no son simples agresiones, sino que son delitos», aseveró Hernández.
La periodista, Michelle Polanco, también de PCIN, explicó que el caso de Quintana constituye un “serio llamado de atención” del régimen para todos los periodistas de Nicaragua, que insisten en mantener su línea editorial de denuncia.
“Mantenemos la alerta que hemos sostenido en la que decimos que ejercer el periodismo independiente e investigativo en el país se está convirtiendo en una carrera de riesgo”, señaló Polanco.
Las representantes de PCIN, consideran que esta será una «nueva modalidad» del régimen en su intento por acallar al periodismo nicaragüense.