El régimen de Daniel Ortega anunció una reducción de 3% en la tarifa eléctrica y que por seis meses no se aplicará el deslizamiento del córdoba con respecto al dólar. Sin embargo, la medida aunque esperada es insuficiente

En abril, los empresarios pidieron rebajar la tarifa de electricidad, entre 15% y 20%, basados en la rebaja de los precios de los hidrocarburos a nivel internacional. Al llamado también se sumaron el Consejo Superior de la Empresa Privada, (Cosep) y la Cámara de Comercio Americana de Nicaragua (AmCham) que pidieron un recorte de 17% en el precio del suministro eléctrico.

“En la posición pública que dimos a conocer señalamos acciones que están ahí en las manos de las autoridades implementar para que, a la familia del barrio, de la comunidad; para que a la empresa que genera el empleo para esas familias que vive en ese barrio o esa comunidad puedan todos ver esa tarifa reducida”, dijo José Adán Aguerri, presidente del Cosep.

Aguerri manifestó que los precios del petróleo se han reducido y esto permite que haya una disminución en la tarifa.

Para el economista Luis Núñez, esta supuesta reducción no tiene ningún impacto en la tarifa real de la energía por varias razones.

La primera es que el año pasado se incrementó en un 20% la tarifa de electricidad. Otra de las razones es que se redujo el subsidio, antes era entre el 30 y el 40%. Con la reducción quedó entre el 25 y el 35% para los que consumían entre el 100 y 150 kilowatios.

Núñez exteriorizó que también hay que tomar en cuenta que la tarifa de la energía eléctrica es dolarizada por lo que hay que agregar un mayor deterioro del 4% anual, o del 0.3% mensual al pago del servicio.

“Como referencia el Cosep hizo una propuesta hace algunos meses para reducir la tarifa en 17%, lo cual fue considerado insuficiente. Ahora bien, esto en cuanto a lo legalmente establecido. Pero el principal problema son los cobros exagerados y alterados del servicio. Hemos visto como han aumentado exponencialmente las denuncias de cobros ilegales que la empresa ha estado haciendo”, explica el economista.

Tarifas han incrementado

Según Núñez recibos que normalmente salían de 100 o 200 córdobas ahora se han elevado hasta 2,000 y 4,000 córdobas sin ninguna explicación. “Ese si es un grave problema al que el Gobierno tiene que atender. Lo más importante no es la tarifa en sí, es el cobro correcto del servicio. De hecho por lo anterior, esto no va a tener ningún impacto en la economía”.

Sobre el aspecto de no aplicar durante los próximos seis meses el deslizamiento del córdoba, eso indica que la tarifa es en dólares, aunque a los usuarios se les cobre en córdobas.

“Se cobra conforme el cambio del dólar, es decir, que el córdoba pierde valor, pero esa pérdida no la asume la empresa sino que se la transfiere al usuario. Ese es el deslizamiento. En este caso se congela, en teoría”, afirma.

Consultora: No compensa los incrementos

Patricia Rodríguez, consultora en energía, considera que la disminución del 3% aún sin el deslizamiento de la moneda no compensa los incrementos anteriores que se han dado en los últimos cinco años, mucho menos compensa los incrementos que hubo en 2019.

“Más de cinco años sin disminución en la tarifa energética como tal, solo hemos tenido aumentos sin justificación alguna y estancamiento, cuando bajó el petróleo en 2015, no subió la tarifa, pero tampoco bajó”, explica Rodríguez.

La consultora en energía reitera que ese porcentaje no representa alivio para nada, ya que el año pasado hubo un incremento del 19.3 % y con los seis meses no se completa el aumento que hubo durante todo el año 2019.

“Tenemos otros incrementos como son los porcentajes altos de pérdidas, pagamos casi todas las perdidas que se generan, no ha habido una disminución en este primer semestre por lo bajísimos precios del petróleo que estuvo hasta en cero, no hemos tenido esa reducción que en otros países equivale a un montón de plata y mucho más del 3%”, concluyó Rodríguez.

 

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