La dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo ordenó, entre el 17 y 19 de abril, en el contexto del aniversario de la Rebelión de Abril, la detención arbitraria por motivaciones políticas de al menos 12 personas, denunció el Monitoreo Azul y Blanco, en un informe.

La organización detalló que el número de detenciones en lo que va del mes, incluyendo a las 12 de los últimos tres días, ya suman al menos 39, de las cuales solo se ha confirmado la liberación de nueve.

Las detenciones que ocurrieron en los últimos tres días el Monitoreo las registró en Carazo (3), Masaya (3), Chinandega (2), Madriz (2), Boaco (1), y Río San Juan (1).

«Las detenciones registradas por el Monitoreo Azul y Blanco continúan en verificación con el fin de confirmar si se tratan de detenciones políticas. Debido a la falta de información y el clima de represión puede que la cifra de detenciones sea mayor», advierte el informe.

Detenidos no han sido presentados

En redes sociales y a través de reportes de medios independientes se han identificado a algunas de las personas detenidas, entre ellas: Arnoldo Guillén Monterrubio, ciudadano mexicano-nicaragüense detenido el 18 de abril en un hostal donde estaba alojado en Corinto, Chinandega.

Guillén, de 61 años, fue apresado con violencia por repartir calcomanías azul y blanco y la Policía lo despojó de su camioneta, refiere un reporte de La Prensa. Además, detalla que el hombre es arquitecto, opositor y ha sido asediado y hostigado, por lo que desde la detención arbitraria la familia lo ha buscado en varias estaciones policiales, donde les han negado cualquier tipo de información, incluso el derecho a poner una denuncia por desaparición.

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Félix Maradiaga, opositor, excarcelado y desterrado político, denunció a través de sus redes sociales, la detención de Brenda Baldelomar, de Chinandega, y de Junior Alexander Miranda, de Teustepe, Boaco, exigiendo el respeto a los derechos de cada uno de ellos y su inmediata liberación.

El fin de semana pasado también se reportó, a través de las redes sociales, la detención de cuatro familiares del expreso y desterrado político Danny García, originario de Masaya; también, la captura arbitraria de la ciudadana Ivonne Espinoza Hurtado de Boaco.

Hostigamientos, allanamientos y amenazas

El documento señala que la dictadura orteguista, a través del uso de la fuerza de la Policía Nacional, también ordenó hostigamientos (38), control territorial (12), amenazas (3), allanamientos (2), y retención (1).

El Monitoreo Azul y Blanco explica que la categoría «control territorial» se refiere a la presencia de agentes de fuerzas del orden o paraestatales en espacios públicos con el fin de intimidar a la población y desalentar o reprimir cualquier intento de manifestación en conmemoración de los cinco años desde el estallido de la Rebelión de Abril.

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El Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más también denunció las detenciones arbitrarias que se han registrado en las últimas semanas, remarcando que el pueblo sigue exigiendo justicia, verdad, libertad y democracia.

Además, señalaron que dichas capturas arbitrarias siguen el patrón de persecución contra familias de personas presas o excarceladas políticas, además de periodistas, defensores de derechos humanos, religiosas, y contra toda ciudadanía que opina y quiere una Nicaragua diferente.

La Lupa Nicaragua
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