España es el segundo país que ha reportado más casos de covid-19 en el mundo con más de 130 mil contagios y más de 12 mil muertes. En este contexto, la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) alista una petición urgente, por medio de firmas, para que el Gobierno español considere medidas de regularización extraordinaria para garantizar los derechos de personas extranjeras en España, que están bajo diferentes estatus migratorios.
A su vez exigió este sábado a las autoridades españolas que “incrementen los índices de reconocimiento del asilo”, que se alejan de la media europea. En el 2019 España recibió 118, 264 solicitudes de asilio, más del doble que en el 2018.
El proceso de regularización permitiría que todos los beneficiados puedan acceder a sus derechos en igualdad de condiciones al tiempo que se reconozca el valor de las aptitudes, dedicación y compromiso que pueden aportar a la sociedad española, se lee en la petición que publicó CEAR en su página web.
Asimismo recordó que la Oficina de Asilo (OAR) acumula hasta la fecha más de cien mil expedientes de asilo pendientes. “Es necesario que los derechos de las personas migrantes en situación administrativa irregular se vean garantizados”, explica.
En el 2019 de más de 60 mil resoluciones se otorgó el estatus de refugiado a 1,653 casos y se brindaron 1, 503 protecciones subsidiarias. Respecto a los permisos por razones humanitarias fueron aprobadas 39, 776 casos de personas provenientes de Venezuela, y mucho menos, de Ucrania, El Salvador, Honduras y Colombia.
Refugio para nicaragüenses desde 2018
España se ha convertido en uno de los países de refugio para cientos de nicaragüenses que huyeron de la violencia política implementada por el régimen de Daniel Ortega desde 2018. Estudiantes, periodistas, activistas encontraron en el país una oportunidad para retomar sus vidas o bien, esperar que la situación del país mejore en algún momento y volver.
El 80 por ciento de las solicitudes de asilo a España en el 2019 correspondían en 80 por ciento a ciudadanos de países como Venezuela, Colombia, Honduras, Nicaragua y El Salvador. En el caso nicaragüense, 5,931 personas habían hecho su solicitud. De estas, 882 solicitudes fueron denegadas, y tan solo 166 personas gozan del estatus de refugiado y un caso tiene protección subsidiaria.
La migración de nicaragüenses hacia España ha sido constante en la historia del país; sin embargo, se aceleró con la crisis que explotó en 2018. Más de 100 mil nicaragüenses salieron del país exiliados. La mayoría de ellos huyó al vecino Costa Rica, y otros más, viajaron a países centroamericanos como El Salvador, Honduras o Guatemala, y luego, cruzaron el Caribe para llegar a Europa o se fueron al norte, Estados Unidos.
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