Ambas ofertas se suman a la propuesta hecha por el Gobierno de España, el primero en ofrecer nacionalidad a los más de 300 expatriados por el orteguismo
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Los gobiernos de Argentina y Chile cerraron filas este martes, 21 de febrero, a favor de los 317 nicaragüenses que en las primeras dos semanas de febrero fueron expatriados por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, ofreciéndoles la posibilidad de obtener la nacionalidad de esos países.
“El Gobierno argentino está dispuesto a otorgar la ciudadanía argentina a Sergio Ramírez Mercado, Gioconda Belli y todos los que están padeciendo lo que está sucediendo en Nicaragua”, indicó la mañana de este martes la periodista Gabriela Cerruti, portavoz del Gobierno de Argentina. Sin embargo, no dio más detalles sobre los mecanismos a los que se debería aplicar para acceder a esa oferta.
La Cancillería de Chile, a través de un comunicado, también informó que ese país “ante la reciente decisión del Estado de Nicaragua de privar de su nacionalidad y derechos políticos a más de 300 personas nicaragüenses, identificadas como opositoras políticas, el Gobierno de Chile arbitrará los medios legales necesarios para ofrecer la debida protección internacional, que les permita residir en el país y obtener la nacionalidad chilena según las normas constitucionales y legales que la regulan”.
El Gobierno de Chile resaltó que esta alternativa es puesta en discusión “para quienes han sido injustamente expatriados de Nicaragua y voluntariamente decidan tomarla”.
Las propuestas de los gobiernos de Argentina y Chile se suma a la oferta realizada por el Gobierno de España, quien también ofreció nacionalidad para los más de 300 nicaragüenses declarados apátridas por la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
El escritor Sergio Ramírez Mercado, una de las personas enlistadas en el segundo grupo de nicas expatriados, dijo estar agradecido por el “gesto solidario” de Argentina de ofrecerle la ciudadanía.
“Siempre recuerdo que para Rubén Darío Argentina fue también su patria, y lo es también la mía”, indicó Ramírez en sus redes sociales.
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La escritora Gioconda Belli, a través de sus redes sociales, también agradeció las posturas de los gobiernos de Chile y Colombia, que se han pronunciado sobre la situación expatriaciones y encarcelamientos políticos en Nicaragua.
Gabriel Boric, presidente de Chile, se solidarizó con los nicaragüenses vía Twitter, señalando: “no sabe el dictador que la patria se lleva en el corazón y en los actos, y no se priva por decreto”.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, también se solidarizó con los excarcelados políticos, que además fueron declarados apátridas por la dictadura, expresando que América Latina “debe ser un espacio sin presos políticos y sin presos sociales”.
“Toda violación a los derechos humanos debe ser condenada por toda la comunidad internacional. Mi solidaridad con los 94 nicaragüenses que fueron despojados de su nacionalidad”, indicó Petro en sus redes sociales.
Entre el 9 y el 15 de febrero, el Tribunal de Apelaciones de Managua, por órdenes de la dictadura Ortega-Murillo, despojó de su nacionalidad a 317 nicaragüenses, 222 de estos sufrieron meses y hasta años de encierro y torturas en los diferentes centros carcelarios del país.
