Tras once días de periplo desde Guatemala, un grupo de 46 nicaragüenses finalmente lograron retornar a territorio nacional, la madrugada de este domingo 19 de julio de 2020. Después, que este sábado, habrían sido autorizado por Migración de Honduras para transitar, por el vecino país catracho, desde Gutemala.
El transito se logró mediante una autorización del gobierno de Juan Orlando Hernández, quien «solicitó» a las autoridades policiales y militares su «colaboración» para que los nicaragüenses pudieran circular “sin ninguna limitación más allá de las que confiere la ley.
El documento contaba con las firmas del Secretario Ejecutivo de Gestión de Riesgos y el Secretario de Estado en los Despachos de Gestión y Contingencias Nacionales, que atendieron la intermediación de organismos de derechos humanos y una iglesia evangélica.
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El Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), que ha dando seguimiento a la situación, demandó al régimen de Ortega frenar las dilaciones y que garantice la entrada a los connacionales que aún aguardan una aprobación para su retorno al país.
Pese a que semanas atrás, la vocera del régimen sandinista, Rosario Murillo señalara que permitirían la entrada de los connacionales al país, «bajo el modelo ordenado y seguro que tenemos que tomar en cuenta en estos tiempos de pandemia», había frenado la entrada de éstos nicaragüenses que han permanecido varados entre a frontera de Honduras con Guatemala.
De igual manera el Cenidh señaló a través de su cuenta oficial de Twitter, que desde hace varias semanas ha recibido denuncias de personas que se encuentran tratando de retornar al país. Asimismo, detalló que permanece en comunicación con organizaciones para agilizar gestiones migratorias y de ayuda humanitaria.
Incumplimiento de obligaciones internacionales
A finales de junio, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), advirtió que Nicaragua tiene “obligaciones internacionales” de garantizar el retorno a las personas varadas en el extranjero durante el contexto de la pandemia”, sin embargo la dictadura sandinista se negó a responder las consultas al respecto.
Y no fue hasta que Murillo días después, en una de sus intervenciones a medios oficialistas indicara que se tomarían en cuenta los requisitos para que los connacionales puedan ingresar a su país, entre los que destacó que se les pondría en cuarentena por el bien de sus familias y de ellos mismos.
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La ministra de salud, Martha Reyes, señaló a medios oficialistas que el periodo de cuarentena implementado en Nicaragua es de 14 días, sin embargo, hay personas que voluntariamente amplían ese período a 21 días.
El régimen impone estas condiciones para el retorno de los connacionales, pese a que en lo interno del país, la cuarentena no ha sido promovida como lo orientó la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS).