El Ministerio de Salud (Minsa) reportó cinco personas fallecidas en la última semana por COVID-19, la misma cantidad de muertes que la semana anterior, manteniendo una reducción por segunda semana consecutiva.
De acuerdo al informe oficial, leído por la ministra de salud, Martha Reyes, la pandemia ha provocado la muerte de 133 nicaragüenses en cinco meses.
Según el último informe oficial, en la semana del 11 al 18 de agosto, también ocurrieron “otros fallecimientos” en personas que estuvieron en seguimiento, debido a “tromboembolismo pulmonar, diabetes mellitus, infarto agudo al miocardio, crisis hipertensivas y neumonías bacterianas”.
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Aunque el Minsa no reconoce que esos “otros fallecimientos” sean por causa del COVID-19, especialistas en salud en el país, afirman que esas son parte de las enfermedades preexistentes que padece la persona, pero que la causa principal de la muerte es el virus.
El pasado 12 de agosto, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una actualización en la que señala que el 5% de los pacientes que desarrollan la enfermedad de forma grave suelen presentar tromboembolismo y se ha documentado que otros pacientes presentaron lesiones significativas de miocardio.
¿Se acabaron los brotes?
Por primera vez, las autoridades de salud no hicieron mención sobre la continuidad de los “brotes a través de contactos claramente establecidos”, un término que vienen utilizando desde mediados de mayo, cuando médicos independientes empezaron a decir que el país estaba en la etapa de transmisión comunitaria.
Para las próximas semanas, los profesionales de la salud que están fuera del sistema del Minsa, han advertido sobre la posibilidad de un rebrote de casos, debido a que la población ha empezado a flexibilizar las medidas de prevención.
Este martes, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió a los países, incluyendo a Nicaragua, a no bajar la guardia ante esta enfermedad.
El pasado 25 de mayo, la OPS reconoció que Nicaragua ya había entrado a la fase de transmisión comunitaria, que es la etapa cuando los países experimentan brotes más grandes de transmisión local y las autoridades ya no pueden identificar el nexo epidemiológico del paciente.
Casos acumulados
Partiendo del informe del Minsa, en la última semana hubo una reducción de 17 casos de contagios en Nicaragua.
En los últimos siete días, solamente se registraron 196 contagios, menor a los 213 casos positivos “confirmados o probables por clínica” reportados en el anterior periodo.
De modo tal, que el país acumula un total de 4,311 casos que han sido reportados como positivos desde el inicio de la pandemia.
No obstante, el Observatorio Ciudadano, al 12 de agosto, reportó un acumulado de 9,646 casos sospechosos verificados por el equipo en todos los departamentos y regiones autónomas.
Según la ministra Reyes, a la fecha se han recuperado 3,211 personas desde que se detectó el primer caso en el país.