La joven ingeniera ambiental, María Elena Salgado quien se dedica desde corta edad a trabajar la temática medioambiental, colaborando con voluntarios como Red de Jóvenes por el Agua en Nicaragua, nos visitó en La Guarida del Oso para hablarnos de un emprendimiento novedoso en el que esta vinculada que ha dado mucho de que hablar en los medios de comunicación.
¿Contanos de tu proyecto llamado Hydrolutions, de qué se trata y cómo nace?
El equipo está conformado por 4 integrantes (3 ingenieros medioambientales y 1 ingeniero químico) que ya nos conocíamos porque formamos parte de un voluntariado que yo coordino – Red de Jóvenes por el Agua – entonces desde años anteriores habíamos escuchado de este concurso que hace UNICEF llamado Generación Sin Límites, entonces nos inscribimos porque uno de los muchachos tenía una buena idea y pensamos que tenemos todo lo necesario para ganar este concurso, entonces nos inscribimos y fuimos al campamento.
¿Cómo surge el proyecto que llevaron a cabo?
Fue un campamento de tres días. Llegabas con una idea de proyecto y en esos tres días tenías que conformar todo el proyecto, presupuestar el gasto y a quien ibas a beneficiar, vender y estructurar tu idea en ese lapso porque de ese campamento solo saldrían seleccionados 2 grupos. Así nace Hydrolytions, porque ya teníamos la idea de lo que haríamos, pero hasta ese momento lo planteamos.
¿En qué consiste su proyecto?
El proyecto que nosotros llegamos a concretar fue elaborar jabones a partir de aceite usado de cocina, que es uno de los principales contaminantes de los cuerpos de agua.
Queríamos crear una alternativa que genere la menor cantidad de desechos; buscar qué hacer con esos residuos; generar empleos para jóvenes de una comunidad ubicada en el corredor seco. Estas personas dependen casi exclusivamente de la agricultura, entonces buscamos que tengan otra alternativa y así formamos esta idea de proyecto
¿Cuáles son los objetivos de Hydrolutions?
Nuestro principal objetivo es poder brindar a estos jóvenes de la comunidad Totumblita en Ciudad Darío una alternativa de empleo, queremos estructurar una empresa como tal, en la que ellos sean los protagonistas, nosotros llevar los conocimientos técnicos para que ellos aprendan y disminuir la contaminación de los cuerpos hídricos, objetivo social porque queremos ser una empresa con enfoque social que pueda ayudar a los jóvenes a desarrollarse tanto personal como profesionalmente.
¿Cómo fué la experiencia competitiva en el programa?
Después de ese campamento, seleccionaron dos equipos de Managua y dos equipos de la Costa Caribe se nos dió un fondo semilla y desde enero hasta egosto de 2020 trabajamos el proyecto porque íbamos a la siguiente etapa. Ante un jurado nacional íbamos a demostrar que nuestra idea funcionaba. Se elegirían a dos equipos para representar a Nicaragua a nivel internacional. Al final quedamos dos equipos, nosotros como Hydrolutions y el equipo EcoJoven .
¿Qué se destacó de esta competencia a nivel nacional?
Ambas son propuestas medioambientales y eso se destacó bastante de Nicaragua que habían muchas innovaciones medioambientales, y en otros países ya se está impulsando otras alternativas como de formación personal para jóvenes, empoderamiento de mujeres en la ciencia e inserción laboral. En otros países hay un enfoque social y en Nicaragua destaca el enfoque medioambiental.
¿Qué les motivó para participar en el programa?
Estamos motivados en ser agentes de cambio y queremos ayudar al país desde nuestra expertise, nosotros somos ingenieros pero queremos que nuestros conocimientos se transmitan hacia el resto de la población y generar un cambio social. Además, uno de nuestros compañeros, Javier Guillén, es de una comunidad rural y ya conocía de primera mano las dificultades que se viven en las zonas rurales, yo trabajo en distintos proyectos y tengo involucramiento con la parte rural.
¿Cuál es la importancia de trabajar con jóvenes específicamente?
Nos dimos cuenta que hay mucho trabajo que hacer y sobretodo impulsar a los jóvenes porque lo que hacen estos jóvenes es migrar, se van a la capital o se van a otros países donde están susceptibles a maltratos, trata de personas, discriminación y entonces este proyecto responde a un sinnumero de problemáticas y tambien impulsa a trabajar desde las comunidades.
No se trata de buscar como salir del país, sino de tratar de construir un país mejor. Eso es lo que nos ha motivado tener la esperanza de que se puede salvar el país y nosotros los jóvenes tenemos la posibilidad de hacerlo.
¿Qué destacas del proyecto en relación a generar empleos?
No contábamos con que iba a haber una pandemia y ahora los niveles de desempleo son mayores. Este proyecto vino en el momento justo porque ahorita es más que necesario, según la ONU 6 de cada 10 jóvenes están sin empleo a nivel mundial y en este momento es necesario innovar.
En el país existen proyectos que se han desarrollado anteriormente, pero ninguno lo había visualizado como una alternativa para estas comunidades vulnerables. Necesitamos innovar con los recursos y desechos que tenemos para buscar cómo hacer algo.
¿Qué retos tuvieron que afrontar para realizar el proyecto?
Es una experiencia que nos cambió a todos en el equipo porque teníamos una idea del proyecto, pero las cosas se van complicando.
Por ejemplo, la pandemia nos cambió todo porque el fuerte de nuestro proyecto era viajar a la comunidad y solo pudimos hacer una visita, entonces tuvimos que empezar a desarrollar el proyecto desde Managua, estandarizar el proceso productivo para esperar dar tiempo a que la situación mejorara un poco y llegar, pero al final no pudimos ir de nuevo porque también comprometeremos la salud de ellos.
¿Qué rescatas de estas retos?
Ha sido una experiencia retadora, pero la hemos sabido afrontar. Tuvimos que buscar muchas alternativas como hacer videos tutoriales, dado que no podemos ir este año, ya para que la gente vaya empezando a conocer como hacer el proceso, esta experiencia nos ha puesto a prueba a todos los miembros del equipo porque al final teníamos que presentar resultados y demostrarle al jurado que estamos capacitados para representar a Nicaragua y no pudimos decir que por la pandemia íbamos a detener todo, a pesar de todo lo que ha pasado hemos sido exitosos y la aceptación de la gente ha sido increíble.
¿Cuál es el siguiente paso a dar para Hydrolutions?
Recién enviamos nuestra aplicación porque tenemos que pasar un filtro más para ver si Hydrolutions pasa a competir con los demás países, pero realmente nosotros tenemos la intención de seguir con nuestro proyecto clasifiquemos o nó, ganemos o nó, porque hemos recibido el apoyo de la gente y de otras organizaciones.
Entonces Hydrolutions está para rato y vamos a seguir trabajando para lograr nuestro objetivo que es llegar a la comunidad, con el fondo semilla tenemos los materiales y esperamos con la venta de jabones podamos sostener el proyecto en un caso que no ganemos la competencia.
¿Qué harían si ganara la competencia?
Queremos lograr conformar la empresa como tal, legalizarse en el país y arrancar. Otro componente que queremos integrar al proyecto es capacitar a los jóvenes en temas administrativos, financieros, liderazgos porque queremos que ellos sean parte de la empresa.
No que sea de los 4 miembros del equipo, además de ayudarnos con la empresa del jabón, que ellos sean parte ya que con ese dinero podríamos llegar a todo el país, varias sucursales, realizar talleres de elaboración de jabón. Hay mucho que sacarle a este proyecto pero queremos que sean ellos mismos quienes lo administren.
¿Cuánto alcance ha tenido el proyecto?
Hemos visto que en otros países están interesados en realizar este tipo de proyecto. Nos han contactado de Honduras porque un voluntariado quiere hacer lo mismo y nosotros no estamos en plan “esta es nuestra idea y no se la vamos a pasar a nadie”, creemos que es necesario ayudar a desarrollar este tipo de proyectos por cuán necesario es el jabón ahora en tiempos de pandemia.
¿Cuán importante consideras que es replicar el conocimiento para que otros grupos se animen a hacerlo?
Muy importante, más que para generar el empleo, también para generar consciencia, creo que a través de este tipo de trabajos matas más de dos pájaros de un solo tiro, estás creando consciencia, generando una alternativa de empleo y solventando una problemática a nivel centroamericano, empezar a visualizarnos no como país sino cómo región, tenemos la facilidad de las redes sociales ahorita y hay que utilizarlas bien para poder transmitir esta iniciativa, sacar a las personas del riesgo e impulsar adelante a la región, no visualizarnos solo como país, sino entender que hay distintas problemáticas, pero son iguales.
¿Qué impacto buscan causar en la juventud?
Generar jóvenes más empáticos, más comprometidos y que dediquen tiempo a estas causas sobretodo que aporten desde sus carreras y sus profesiones porque ahora vamos transformando y es algo que destacar de nuestra generación: somos bien activos y nos involucramos. Hay personas de todas las carreras participando en los voluntariados, ya se entiende como una situación que nos compete a todos y es importante que estos conocimientos se vayan replicando.
¿Cuán importante es la participación igualitaria en este proyecto para Hydrolutios?
El enfoque de género es bastante importante sobretodo cuando vas a una zona rural donde el papel de la mujer se relega únicamente a las labores domésticas; a recoger agua. Siempre hablo de este tema porque en la parte rural el papel de la mujer se ve bien afectado por la cultura que ya existe en el país y este proyecto también va a servir para integrar a las y los jóvenes para que entiendan que son iguales, tienen las mismas capacidades y queremos buscar que haya ese equilibrio. Queremos crear consciencia de que haya un involucramiento mutuo.
¿Cuál es el rol de la juventud en la búsqueda de un cambio por el medioambiente?
El papel de la juventud en el medio ambiente ha sido bastante destacado, el año pasado hubo bastante manifestaciones lideradas por jóvenes a nivel mundial y ahora veo que la juventud tiene un papel bastante crítico y exigente con las autoridades de su país porque muchas de las manifestaciones que se hicieron eran por eso, porque cada año hay cumbres por cambio climático y solo llegan los líderes mundiales a sentarse, entonces la juventud está ejerciendo un ejercicio de fiscalización de todas esas cosas que se firman.
¿Cuán importante es trabajar en conjunto con comunidades rurales?
Ha sido un proceso de aprendizaje también para nosotros. A veces nosotros creemos que por tener una carrera universitaria sabemos más y cuando llegas a estas comunidades, están personas ya saben las cosas, una práctica ancestral que ellos tenían era usar la grasa de cerdo para realizar jabones, entonces te das cuenta de que ya hay conocimiento, y así como vos llevas conocimiento a la comunidad, te llevas de ella conocimiento y esto nos hace crear empatía y poner la lupa en estos lugares, porque a veces tenemos los problemas a la vuelta de la esquina y no nos damos cuenta.