El excarcelado político Óscar Centeno recuerda en entrevista con La Lupa el terror que vivió durante sus días en prisión y afirma que durante su estadía tuvo que permanecer en una celda de cuatro metros de largo por tres de ancho, que compartía junto a otros 22 reos comunes.
Centeno indica que en la celda debían dormir unos en el suelo, otros de pie, e incluso algunos sobre otros, “encajándole los pies unos a otros, porque sólo habían cuatro camarotes”.
Este joven, originario de León, fue liberado bajo órdenes del régimen de Daniel Ortega junto a otros tres reos políticos, entre el día martes 13 y miércoles 14 de julio, según indicó el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh).
El exreo político afirma que no esperaba su excarcelación, sin embargo agradece poder estar de vuelta en su hogar y compartir nuevamente el tiempo con su familia, pese a que aún espera el dictamen de su sentencia, que determinará si el Penal de Justicia de León lo declara libre de los cargos de tenencia de estupefacientes, delito por el que es acusado cuando fue apresado el cuatro de mayo de este año.
A él lo están criminalizando porque participó en los tranques y era uno de los camilleros de los puestos médicos. Él socorría a los heridos durante la represión desatada en abril de 2018, los montaban en una moto y los llevaba a puestos médicos clandestinos.
¿Cómo fue tu estancia en la Prisión de León?
Fue un sufrimiento más que todo, porque desde que me vinieron a traer a mi casa, me estuvieron golpeando durante varios días, porque querían sacarme información de otro reo político de Chinandega al que ellos me vinculaban.
“Me retrasaban mi comida”
Centeno expresa que durante sus primeros días de estancia en la Prisión de León los custodios le retrasaban su comida, e incluso no se la entregaban. Sin embargo, contó con el apoyo de sus compañeros de celda, quiénes le facilitaban alimentos, pese al maltrato de los funcionarios del penal.
Explica que los custodios estuvieron sacando a algunos reos por presentar aparente síntomas de COVID-19, luego de que se les tomara la temperatura. Asimismo indicó que esas personas fueron llevadas a aislamiento y puestas aparte de los demás encarcelados.
Pide liberar a presos políticos
Con la voz entrecortada, pide al régimen de Ortega la liberación del resto de los reos políticos que aún permanecen a la espera de poder volver a reunirse con sus familias.
“Que busque cómo hacer negociaciones para que ya no quede ni uno en prisión, porque en los penales se sufre de la manera menos pensada, no sólo por los tratos físicos, sino por los maltratos psicológicos”, advierte Centeno.
Asegura a su vez que nunca esperó su excarcelamiento, puesto que este viernes 17 de julio será el dictamen de su sentencia y estaba pensando en los posibles ocho años que el régimen le dejaría en prisión, tal como le había advertido la Fiscalía en citas anteriores.
Cenidh aboga por cese de hostigamiento
El abogado defensor de Centeno, Maynor Curtis del Cendih, declaró a La Lupa que espera que este viernes 17 de julio el Tribunal de Apelaciones absuelva a Centeno del delito al que fue señalado como culpable.
Curtis pidió también que cesen el hostigamiento contra Centeno, así como el asecho que sufrió previo a su arresto y que sufre hasta ahora, puesto que el excarcelado indicó durante su entrevista que paramilitares en motocicletas asechan el barrio donde habita constantemente en forma de recordarle que es vigilado.
También demandó que el cese del hostigamiento sea no sólo para Centeno, sino también para el resto de reos políticos que han sido excarcelados en los últimos días en Nicaragua.
Curtis indicó que “no le extrañaría” que este 17 de julio se cancele la lectura de sentencia de Centeno, puesto que es ya una costumbre en los casos de los presos políticos, debido a que una vez que son excarcelados, no les vuelven a remover los casos viejos a los que fueron inculpados.
Asimismo el funcionario del Cenidh señaló que a los excarcelados políticos generalmente se les suspenden las audiencias o bien se les reprograman, hasta que con el pasar del tiempo son dejados olvidados por parte del Tribunal de Apelación.