Los manifestantes junto a hombres y mujeres de la prensa independiente fueron el blanco de la represión de la policía orteguista que, este martes, salió a las calles desde horas tempranas a impedir una manifestación que había sido convocada por la por la oposición la semana pasada.

Los agentes golpearon, amenazaron y provocaron daños a los vehículos de los periodistas que daban cobertura a los piquetes que realizaron los grupos opositores que no lograron marchar ante el asedio y el estado de sitio que impuso en las calles la policía bajo las órdenes de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

El periodista de Nicaragua Actual, Yelsin Espinoza fue amenazado de muerte por un uniformado de la Dirección de Operaciones Especiales (DOE) que se acercó a su vehículo en los alrededores de la Iglesia Divina Misericordia, donde minutos antes se había realizado un piquete, para verter las amenazas mientras el resto de colegas eran replegados por los agentes.

«Acórdate que sos de la Calle Real…y te voy a palmar a tu familia”, dijo el policía orteguista al comunicador que el pasado 17 de febrero regresó a Nicaragua tras permanecer un año exiliado en Costa Rica.

En las inmediaciones de la Iglesia Divina Misericordia un grupo de opositores de forma rápida al final de la tarde se manifestaron gritando consignas contra el régimen para exigir unidad y la libertad de los presos y presas políticas, pero una vez que se retiraron los hombres y mujeres de prensa que quedaron en el lugar fueron “acorralados” por los agentes y fanáticos orteguistas.

En un acto que evidencia la desesperación del régimen por callar a la prensa nacional, los mismos oficiales de la DOEP poncharon las cuatro llantas del vehículo donde se movilizaban el periodista Wilih Narváez y el camarógrafo, Jorge Urroz.

“Escuché decir a uno de los antimotines vamos por los medios, esta es la paz que pregona el gobierno, esta es la tolerancia que recomendó el general Julio César Avilés. Hemos visto que es claro quiénes fueron los que dirigieron este tipo de acción, similar a acciones delincuenciales acuerpadas por agentes de la policía nacional, primero dijeron vamos sobre los periodistas y vemos el daño ocasionado, es parte de las acciones que tristemente está haciendo la Policía que se hace llamar nacional, pero es partidaria”, denunció Narváez.

El periodista de Onda Local, Julio López también fue víctima de la actividad ejecutada por los agentes que como “delincuentes” también poncharon una de las llantas del automotor donde se movilizaba el comunicador.

Gente corría despavorida en Metrocentro

Horas antes, cerca del mediodía de este martes, los agentes de las fuerzas especiales se tomaron el interior del centro comercial Metrocentro donde con violencia acorralaron empujaron a las personas que pretendían manifestarse, incluso ahí la embestida también fue contra los  periodistas independientes que ejercían su labor de informar a la ciudadanía.

En ese centro de compras la Policía al servicio del dictador detuvo al menos a una docena de opositores de quienes se desconoce su situación.

Mientras decenas de manifestantes corrían por los pasillos de este centro de compras, un grupo de agentes acorraló a los periodistas y los obligó a abandonar el lugar. En medio de empujones, mientras descendían a la planta baja un oficial golpeó en el rostro a Noel Miranda, periodista de Artículo 66.

“La Policía cercó a los ciudadanos y a los periodistas, y un oficial me acertó un golpe en el ojo izquierdo y mi dentadura, lo único que hacemos es ejercer nuestro derecho a informar, exigimos respeto, hacemos lo que los periodistas sabemos hacer que es informar”, señaló Miranda.

Álvaro Navarro, director de la plataforma digital Artículo 66 y dirigente de la organización Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN) señaló que estos actos son “acciones dirigidas” contra los comunicadores.

“Como periodistas independientes y comunicadores que andamos en  la calle podemos ver en principio la violencia de parte de los efectivos, hicieron que se parquearon y en realidad atacaron a los periodistas, obedece a una acción clara y dirigida de la dictadura de acallarnos (…) vamos a informarlo a la comunidad internacional”, dijo Navarro.

A pesar que las fuerzas policiales se tendieron desde muy temprano en varias vías de la capital, algunos grupos lograron hacer sus piquetes. En el sector de Monte Tabor, jóvenes opositores bloquearon por algunos minutos la Carretera Sur.

“De que se van, se van”, decían los jóvenes que participaron, entre ellos el excarcelado Byron Corea.

En medio de la confusión que se apoderó de este día el opositor, Juan Sebastián Chamorro, denunció que fue detenido en un retén policial después de abandonar la Iglesia Divina Misericordia.

“Después del piquete exprés en la Iglesia de la Divina Misericordia me retuvieron por unos 20 minutos en un retén policial. Me dejaron ir sin incidentes”, dijo Chamorro en su cuenta de Twitter.

Organismos se pronunciaron

Cabe destacar que desde la semana pasada cuando el comentarista Jaime Arellano y el empresario José Dolores Blandino hicieron la invitación a la marcha de este 25 de febrero se encuentran secuestrados en su propia casa de habitación, debido a que la Policía instaló un retén en las afueras de cada vivienda, igual que con otros opositores.

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) advirtió que “para ejercer la protesta social es necesario libertad de expresión, participación política, derecho de reunión y defensa de derechos. Las medidas de las autoridades de Nicaragua para evitar estos derechos violan obligaciones internacionales del Estado”.

+ posts