A cuatro años del asesinato de la joven brasileña estudiante de medicina, Rayneia Gabrielle Da Costa Lima y, a tres años de la liberación de su asesino confeso “continúo en búsqueda de justicia”, afirma María José Da Costa, en una carta escrita a propósito del aniversario de muerte de su hija. 

El crimen fue perpetrado el 23 de julio de 2018, en el reparto Lomas de Monserrat, en Managua. Pierson Adán Gutiérrez Solís, un integrante de los grupos paraestatales armados durante las protestas de 2018, confesó el hecho.

Y aunque en un inicio Gutiérrez fue procesado y condenado a 15 años, luego en apelación le fue rebajada la pena por un delito común: Homicidio y portación o tenencia ilegal de armas de fuego y municiones. Justo un año después del crimen, Gutiérrez Solís fue beneficiado por el régimen con una amnistía y el 5 de julio de 2019, la Sala Penal Uno del Tribunal de Apelaciones de Managua (TAM), ordenó su libertad.

Desde entonces la madre de la joven brasileña ha mantenido con firmeza su demanda de justicia y ante la negativa encontrada en los tribunales de Nicaragua, a través de Acción Penal, que le ha brindado asistencia legal la ha buscado ante mecanismos internacionales.

Y dentro de esa línea fue que remitió una carta a Acción Penal, para recordar que sigue pendiente del caso, confió el abogado Boanerge Fornos, quien expresó que la madre de Da Costa Lima ha mantenido su posición: “De que se haga justicia, que se investiguen otras líneas porque es probable que no solo esta persona haya actuado solo, sino que hayan más. Y que se haga justicia como debe ser “ 

Fornos recordó que entre las inconsistencias del caso están, que Gutiérrez fue acusado por homicidio y no por asesinato, así como por portación ilegal de armas de fuego ,“como si fuesen armas de uso civil, cuando fueron armas de guerra” las que fueron empleadas.

 “Desde esa perspectiva se le favoreció (a Gutiérrez) al momento en que se le acusó”, expresó el abogado Fornos.

AGENTE PARAESTATAL

Pierson Adán Gutiérrez Solís
El paramilitar, Pierson Adán Gutiérrez Solís había estado activo en el Ejército de Nicaragua hasta 2009.

El también exfiscal, estimó que el sistema de justicia de Nicaragua prefirió dar por cerrado el caso de Gutiérrez, cuando el régimen lo favoreció con la Amnistía, porque recordó que este fue “el único agente paraestatal que fue llevado a la justicia en Nicaragua, porque el caso era tan evidente que no podía dejarse de lado”.

Recordó Fornos, que desde un inicio del proceso, el Ministerio Público les negó a los abogados de Acción Penal, el acceso al expediente fiscal, tampoco recibió los escritos presentados por estos sobre ese mismo caso.

Por ello, en alianza con otras organizaciones defensoras de derechos humanos a nivel internacional Acción Penal buscó justicia para la madre de la estudiante brasileña fuera del sistema de justicia nacional.

Y fue así como Acción Penal elevó una petición de caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a fin que obligue al Estado de Nicaragua a que se haga justicia y repare los daños ocasionados a la víctima, en este caso a la madre.

En abril del presente año la CIDH notificó al Estado de Nicaragua sobre el caso solicitando que se pronunciara sobre la petición de caso. Pero “desconocemos si a la fecha el estado de Nicaragua ha contestado esa notificación que le hizo la Comisión Interamericana”, manifestó Fornos.

Tras señalar, que pese a los esfuerzos por lograr justicia por el asesinato de la joven brasileña, existe la probabilidad de que el Estado de Nicaragua tras su anuncio de retiro de la  Organización de Estados Americanos (OEA),  intente desconocer la competencia de la CIDH  y eventualmente la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH).

ESTADO TIENE OBLIGACIONES

No obstante, Fornos considera que “aún el Estado de Nicaragua tiene obligaciones que cumplir y el Sistema Interamericano de Derechos Humanos ampara los derechos de esta víctima”, sobre todo porque para la salida efectiva de la OEA existe un período de dos años.

Y  “al estar una petición de caso dentro del período en que el Estado de Nicaragua no denunció la Carta de la OEA , y dentro del período que ellos pudiesen retirarse, la Comisión tiene competencia, la Corte tiene competencia y aunque el Estado quiera negar, no quiera contestar esa petición de caso, (la misma) va a seguir su curso”, dijo Fornos.

Por tanto, el abogado de Acción Penal reiteró que junto a la alianza de organizaciones continuarán impulsando esta petición “para obligar que se haga justicia en este caso”, pues consideran que existen suficientes evidencias “en las graves violaciones que se dieron de la falta de acceso a la justicia de esta víctima y su familia”.

 “Creemos que la Comisión va a tomar en cuenta todo eso para trasladarlo a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Sabemos que hay muchos casos de Nicaragua dentro de la Comisión, pero este es un caso emblemático, un caso muy importante y estamos seguros que la Comisión le está dando la importancia que requiere”, sostuvo el abogado de Acción Penal.

SUEÑOS TRUNCADOS

Rayneia Gabrielle Da Costa Lima, fue asesinada en 2018 a manos de un paramilitar.

María José Da Costa, en su carta lamenta la manera en ocurrió el esperado retorno de su hija a su natal Brasil.

“Infelizmente la recibí de regreso en Brasil, no con una maleta conteniendo sus pertenencias y caminando con la dicha de haber cumplido su sueño, sino dentro de un ataúd y ahí también enterrados sus sueños”, dice Da Costa, quien refiere que desde pequeña su hija “tenía como sueño ser médica, a pesar de la difícil situación financiera, logró estudiar y finalizar sus estudios secundarios”.

Y fue en 2012 cuando ella pensó que esos sueños podrían hacerse realidad, cuando “conoció a un chico con el que se casó, después del matrimonio realizado el 13 de enero de 2013 emigró para Nicaragua para realizar su gran sueño de ser médica”. En Nicaragua Reyneia vivió seis años y seis meses, y durante ese período pudo viajar a Brasil para ver a su familia solo en los dos primeros años, que Da Costa aclara fue “debido al alto costo del pasaje”.

Da Costa, aún precisa como fue el nacimiento de su hija. Fue a la 1:40 de la madrugada, del día 23 de agosto de 1987 de parto por cesárea en la ciudad de Vitoria se Santo Antao- Pernambuco Brasil.

“Rayneia amaba la naturaleza, animales y de preferencia cachorros, gatos y caballos y también amaba a la vida en sí. Tenía una personalidad calma, pero en ciertas situaciones se enojaba, que se le pasaba pronto, ya que tenía un amor inmenso en el corazón”, describe su madre.

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La Lupa Nicaragua