En esta ocasión, tuvimos la oportunidad de conversar con el joven médico general Fanor Avendaño, acerca de la crisis de salud pública en Nicaragua y como el sistema de salud nicaragüense ya estaba deteriorado y el personal de atención se enfrenta a muchos retos para batallar contra la pandemia.
Esta es la continuación de una primera charla que se llevó a cabo en mayo de este año, donde hablábamos de los datos y las proyecciones a esa fecha. En el Twitter se encuentra la primera entrevista.
Según los datos oficiales del MINSA ¿Cómo ha sido el comportamiento de la enfermedad en Nicaragua?
Los datos del MINSA están completamente alejados de la realidad, 2411 casos cuando tenemos más de 20.000 en Honduras, 29 mil en Guatemala, casi 10.000 en El Salvador y 18 mil en Costa Rica; entonces ahí hay algo que completamente no cuadra, primero son países que en mayor o menor medida han tomado medidas para controlar la pandemia, han hecho cuarentena, han disminuido o cancelado completamente las aglomeraciones de personas en bares y restaurantes. Bueno, en Costa Rica abrieron hace poco y tuvieron que regresar un poco con las medidas por los rebrotes que habían tenido y volver a verlos y que Nicaragua está como cinco mil casos abajo de Costa Rica y así hay algunos cuadros.
Pues aquí siguen los bares abiertos, siguen llamando a actividades masivas aunque acaban de cancelar el 19 de julio, recién hubo carreras de moto en Carazo, entonces no cuadra completamente, pareciera que la estrategia del Ministerio es decir que la pandemia va para abajo, decir que el número de contagios está bajando y que el número de muertes también; uno tiene que buscar información adicional, ver lo que dicen los epidemiólogos en este caso -que son los expertos-, estamos prácticamente a ciegas. Vamos con proyecciones, de estas proyecciones lamentablemente se hacen con cifras oficiales, entonces por eso, de repente están muy alejadas de la realidad y se van ajustando.
Las proyecciones nos dicen que en agosto vamos a estar viendo un pico, entonces aquí estamos viendo cómo prácticamente se va moviendo y cuando se vio la primera proyección de Imperial College de Londres -que fue a inicios de junio-, nos advirtió del pico, que probablemente estaría al inicio de julio, pero vemos ahora que a inicios de agosto y esto tiene una causa muy concreta: al no tomar medidas específicas de distanciamiento social y medidas específicas para controlar la pandemia entonces el pico se va moviendo y no sabemos bien cuándo va a ser, porque esto se hace desde esta proyección y se hacen con cifras oficiales, pero que no tiene cifras seguras; entonces si no tienes estas cifras se va modificando este curva pero en realidad no tenemos una certeza de cuándo va a ser y tampoco tenemos una certeza de cuándo puede acabar o cuando podemos estar esté viendo un decrecimiento real de los casos del COVID-19.
Por otro lado, tenemos al Observatorio Ciudadano, que nos hablaba ya de casi 8000 casos con más de 2 mil muertes, si ves las cifras centroamericanas, en Costa Rica y El Salvador está mucho más cerca nuestra realidad, pero aún más si lo que nos dicen los expertos nacionales Rafael Amador y Leonel Argüello, la manera de recopilación de datos del Observatorio –que es una labor invaluable lo que está haciendo- siempre hay un subregistro también, entonces el Observatorio nos pone esto y lo que consideramos es que eso son sus registros.
¿Cómo crees que el sistema de salud pública de Nicaragua podría haber enfrentado a esta pandemia desde su inicio?
Creo que aquí se debería haber implementado un sistema único de salud, el caso de Brasil o lo que han hecho en el caso de Irlanda, juntar los dos sistemas de salud o en este caso los subsistemas de salud, el sistema privado, el sistema público, el sistema de organizaciones no gubernamentales y fundaciones, juntarlos y que trabajen todos juntos como uno solo. La manera adecuada de tratar esto sería juntando todo el sistema de salud, pero aquí ves que el Estado está ocultando cifras, está despidiendo trabajadores por razones políticas y ves que también en los hospitales privados -que algunos han hecho bastante buenas labores y los médicos el personal de ahí cumplen una labor muy sacrificada- también ves que están cobrando tres mil, dólares dos mil dólares la noche, se siente en exceso que hay un enriquecimiento también con la salud.
Realmente debería haber un sistema único de salud combinado, ¿qué es lo que podemos hacer ahorita? Proponer organización en el hospital, para hacer un contrapeso tanto al Gobierno como al empresariado privado que se está lucrando con los precios altísimos que están poniendo a ciertos productos.
¿Cómo sería la forma apta de comunicarle a la población las medidas de seguridad y las medidas de prevención de esta enfermedad?
Sería una campaña de promoción de salud, llegar a la población con medidas de prevención y no sólo de prevención, sino cómo tratarse en casa, un poco más de lo mismo, yo sí reconozco que medios independientes han hecho un gran esfuerzo comunicando medidas y también intentando comunicar la situación real, y esto es lo que podemos hacer ahorita; el trabajo que puede hacer cada uno, con sus compañeros de trabajo y con sus familiares, sobre todo hablar transparentemente, por lo que estamos hablando, que no tenemos datos oficiales, no sabemos cuándo va a ser el pico, pero lo que sabemos es que no está bajando o sea que esto está para arriba, no hay que confiarse, hay que quitarnos esta sensación de falsa seguridad y hay que tomar las medidas correspondientes.
Aquí con lo que está haciendo el Gobierno, no sólo no está dando la información real, sino que la campaña de promoción que están haciendo es contraproducente, porque la gente de cierta manera te dice “yo no creo en las cifras del Gobierno”, la mayoría de las personas -incluso sandinistas- te dicen eso pero están bombardeando constantemente de que todo está normal, estás en una carrera en moto y entonces eso en el inconsciente de la gente entra, porque dicen “ok si esto estuviera tan mal, no nos estuvieran convocando a estas actividades”. Pero si está mal y lo que hay que hacer es afrontarlo sin pánico, que el pánico no te paralice, pero afrontarlo con realidad y seguir tomando las medidas correspondientes y reforzarlas.
¿El Gobierno, de la mano con el MINSA está tratando de mantener esta imagen de falsa normalidad para hacer un posicionamiento en la comunidad internacional?
Como médicos no podemos especular, pero desde un punto de vista político yo lo veo claro, que si el Gobierno quiere mantener esta normalidad internacional para poder reactivar la economía y eso pasa en gran parte por el turismo en Nicaragua y también por esta misma lucha ideológica de crear un enemigo, que es el golpismo y la verdad es que ahora el enemigo es el covid; es una manera de mantener su discurso hegemónico hoy y el tono de siempre, tenés que tener un enemigo y bueno, desde el punto de vista internacional sin duda es un posicionamiento político, porque las noticias que se exportan también son estas de que el sistema de salud sandinista es uno mejor de los mejores del mundo, el sistema de prevención es buenísimo y que por esto sólo tienen dos mil y pico de casos y menos de 100 muertos, entonces pues todo eso es parte de un discurso de política exterior.
¿Podríamos tomar como ejemplo esta situación de crisis o de pandemia para enseñarle a los futuros profesionales de la salud que hay que optar siempre por la medicina preventiva?
Sí, sin duda deberíamos, es una necesidad, es una obligación. Primero porque tenemos una crisis sanitaria que no se ha resuelto a nivel mundial y además nada nos está diciendo que no va a haber otra pandemia, es decir el riesgo latente de otra pandemia y existe, está ahí a la vuelta de la esquina; cuando desde 2007 o antes hay gente que viene hablando del riesgo, en China después de hace unos años ya habían grupos de científicos investigando ciertos tipos de virus y había un virus similar a éste que tenía un riesgo medio bajo. Hay virus que están por encima todavía, que tienen un riesgo de producir pandemia.
Esto quiere decir que aquí hay que mejorar los sistemas de salud mundial, es algo que viene diciendo también la Asamblea Mundial de la Salud desde 2016, también la carta de Shanghai, que te habla de que hay que tener un sistema de salud más equitativo a nivel mundial, de eliminar las inequidades de salud; las inequidades en salud son estos factores que ponen, que unas personas tengan acceso a la salud de mayor calidad y que otras personas no, esto hay que eliminarlo dentro de los mismos países.
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¿Y la educación en salud es necesaria?
Con la prevención y el empoderamiento ciudadano de su salud, por medio de la educación, que todas las personas sin importar de la profesión tengan un conocimiento mayor al que tienen ahorita respecto a temas de salud para que puedan mejorarla y para que puedan cuidarse ellos mismos también.
¿Con qué material o con qué insumo están batallando las y los profesionales de la salud en los hospitales?
Lo primero que hay que decir es que hay por parte de la población el ideal y algunos colegas también, de este heroísmo, que son héroes y heroínas que tienen que estar poniendo el pecho, porque en la realidad pasa; no son héroes, no son heroínas, son trabajadores precarizados que no tienen todos los medios de protección necesarios para salvaguardar su vida y para salvaguardar la vida de su familiar, ¿qué está pasando en los hospitales? bueno tres meses después de que inició la pandemia, el Ministerio de Salud acaba de ir a dejar -de una manera de propaganda partidaria- equipos de protección al Manolo Morales, pero mira cuántos meses después y lo peor es que lo hacen en un acto donde se aglomeran personas, es una contradicción.
Antes de eso lo que estaba pasando, es que había donación de equipos, que la hace la misma organización ciudadana y muchas veces de médicos fuera del sistema para apoyar al médico que están dentro, se hacen colectas, se hacen compras de equipos de protección y se les iba a dejar y los colegas con toda la necesidad -porque en los hospitales a la mayoría no se lo están dando- ya no lo aceptan y están muy agradecidos pero comienza a pasar que deciden no aceptarlo, porque soy golpista si lo hago, y esto lo conozco de una de estas iniciativas que tenía que pasar por el secretario político -que no necesariamente era médico- en los hospitales, entonces ¿cuál es la defensa que tienen los trabajadores? ellos se están costeando sus materiales, las N95 y sus trajes de protección.
Dentro de los hospitales, que defiendan sus derechos que digan “aquí no podemos ir en esta situación,si no tengo equipo de protección personal”, las diferencias laborales para el personal mayor, que no puede estar en la primera línea de trabajo siempre, tienen que estar en otras labores administrativas y si no hay reintegro de los despidos políticos que hubieron, necesitamos una organización de los trabajadores ahí dentro para poder defender sus derechos, independiente de FETSALUD y no sólo el Gobierno, sino también la población tiene que tomar conciencia y estos movimientos de oposición, hay que tomar conciencia de no seguir reproduciendo este discurso de héroe y heroína y que te aplaudo y de un concierto virtual, no, aquí hay necesidades específicas, hay que hablar de mejorar las condiciones salariales.
La propuesta está engavetada en la Asamblea, es una ley de cooperación para
Centroamérica, para que los médicos se igualen al salario centroamericano, la protección de los derechos laborales y dejar de irnos por la vía fácil que decirles de un concierto virtual y hasta aquí está mi apoyo, que lo hayan disfrutado; la población misma debe tomar consciencia.
¿Cómo población, qué podríamos hacer los nicaragüenses para apoyar al personal sanitario en esta instancia?
La población y especialmente los jóvenes deben tomar conciencia y lo vuelvo a repetir, no ir a estas actividades convocadas, ya sea en carreras de motos, sean reuniones con grandes grupos de amigos o no asistir a ese tipo de cosas porque tal vez a los jóvenes no nos va a costar,- aunque han muerto jóvenes e incluso niños menores de 10 años- porque estadísticamente la mayor parte de personas que muere son personas mayores de 50 años, entonces enfermamos nosotros por andar en este tipo de actividades masivas y lo que vamos a hacer es llevar a nuestras casas, donde están nuestros padres, dónde están nuestros abuelos dónde están nuestros mayores y los que van a morir son ellos.
Estar muy conscientes además, que esa persona se enferma y va a necesitar hospitalización y lo que vamos a hacer es también darle mucho más trabajo a los médicos en un sistema de salud ya saturado por algo que pudo haber sido completamente prevenible, porque no estamos hablando de la gente que tiene que salir a trabajar por necesidad, es la gente que sale por ocio, y sin protecciones; aquí no hay ninguna justificación para ello.
Tomando en cuenta el colapso del sistema de salud, ¿Qué está sucediendo con las personas que ya necesitaban atención sanitaria desde antes?
Cuando se satura un hospital por este causa del covid, como vemos en los hospitales de Managua, la gente que necesita tratamiento por padecimiento crónico algunas veces no hay medicamentos, ahora también se está dando un fenómeno en Nicaragua, es algo que desde el Comité Científico Multidisciplinario han dicho varios actores y varios epidemiólogos , la población está prefiriendo quedarse en su casa, en los hospitales públicos la afluencia de pacientes ha bajado relativamente; pero esto tampoco es algo porque animarse o que nos implique estar siempre bien, lo que habla que ha perdido tanta legitimidad el sistema de salud que la población dice “yo me quedo en mi casa aunque me muera“ ¿y que te dice la gente? , “bueno, en el hospital público va a ser pésima la atención voy a terminar muerto o muerta, entonces mejor me quedo en mi casa y si me voy al privado lo que voy a gastar son 30 mil dólares que mejor se los dejo a mi familia”.
Es lo que está pensando, los datos del Observatorio Ciudadano en los últimos reportes se ve, como han ido incrementando los casos de muertes de personas en su casa y todavía hay un subregistro en esa parte, o sea eso es todo lo que logra captar el Observatorio y van aumentando los casos de personas, por lo menos en mi caso, yo tengo varios amigos que en sus barrios y sus comunidades hay gente que ha muerto en sus casas y nadie se informa, que no se registra de ninguna manera y no hay transparencia de información en el Minsa y entonces estamos un poco así, pero decirle a la gente que si bien es cierto hay desconfianza en el sistema de salud, también hay médicos buenos no partidarios que están trabajando ahí y también ser muy enfático en esto, de que hay cosas que no se pueden resolver en las casas, hay cosas que necesariamente tenés que ir al hospital.
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Hay casos que deben ir definitivamente al hospital…
Hay que saber reconocer cuándo ir al hospital también, pero no dejarse morir pues en muchas ocasiones la gente prefiere no ir y piensa aquí con un tanque de oxígeno que puedo sobrevivir y necesitas otro tipo de equipo; también los tanques de oxígeno es algo insostenible, pues los precios por la misma sinceramente es considerada alta y la falta de regulación del Gobierno, de repente ves tanques de oxígeno de 800 dólares y que de diario te están cobrando entre 120 y 200 dólares por recargas, nadie puede mantener esto, muy poca gente, tal vez el 1% del país, la población no puede mantener esto y se cuida en casa por un poco.
¿Qué lectura te deja que el régimen aun teniendo en cuenta toda esta situación despida profesionales de la salud cuya experiencia y conocimientos son más que necesarios?
Una política que no se corresponde con la realidad y eso es lo principal, necesitan más médicos en los hospitales, están despidiendo médicos y lo peor es que no estás contratando el personal necesario para suplirlo, hay testimonios zonas alejadas de que han despedido algunos médicos, de esos médicos no tienen cámara y no tienen la repercusión mediática y lo que hacen es que los compañeros jóvenes los sobrecargas de trabajo y eso implica la precarización laboral y también implica de que la calidad disminuye también.
¿Cómo podemos catalogar al Gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo en materia de atención en salud?
En un marco también de lo que están haciendo gobiernos a nivel internacional, hace poco escuché en un podcast que hizo Fátima Villalta con Erika Guevara – que es la encargada regional para Amnistía Internacional- que el gran peligro de esta pandemia era que los Gobiernos lo que estaban haciendo cada día es tomar medidas autoritarias -como los que hacen en El salvador-,tomar medidas arbitrarias que van en contra del estado de derecho o como en otros países, por ejemplo en los países asiáticos, que no pudo controlar de cerca la pandemia y lo hacen porque hay un sistema de rastreo de sus ciudadanos, bueno no es que
China esté descontenta por implementar más restricciones o más rastreros a sus ciudadanos y que países como Corea también lo haya hecho; entonces ahí hay una crisis de derechos humanos.
En la problemática de derechos humanos a nivel mundial, porque los Gobiernos están obteniendo demasiado poder con la excusa de controlar la pandemia y en el caso específico de Nicaragua, que había un aparato represivo instaurado, todavía es más absurdo que el Gobierno no ha implementado medidas para control de la pandemia, pero bueno están incumpliendo cosas como el acceso a la salud, es un derecho universal, el de la salud. Está incumpliendo derechos como la seguridad laboral, al hacer despidos por razones políticas, que están exponiendo a sus trabajadores prácticamente a morir.
Esto puede estar penado, sin duda hay una violación a los derechos humanos que como hablamos en la primera entrevista también hay que tenerlo muy presente, hay que escuchar a las personas que tenés, que te hablan con propiedad, con base, con fundamentos, que se dedican también al derecho internacional, de los derechos humanos, darle seguimiento y como se dan y a estar muy presentes y muy activos en este proceso, porque los derechos humanos no pueden ser de los labios para afuera, ni pueden tomarse al bolsazo, como decíamos como un discurso político en contra la dictadura; los derechos humanos trascienden a la dictadura.